Los Ángeles (EE.UU.) (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, describió este domingo a Los Ángeles como una ciudad «invadida y ocupada por inmigrantes ilegales y criminales» y aseguró que las protestas desatadas en respuesta a las redadas masivas de migrantes «fortalecen» su determinación de deportar.
«Estos disturbios sin ley sólo fortalecen nuestra determinación. Estoy ordenando a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth; y a la fiscal general, Pam Bondi (…) que tomen todas las medidas necesarias para liberar a Los Ángeles de la invasión de inmigrantes y poner fin a estos disturbios de inmigrantes», escribió el mandatario en Truth Social.
Los comentarios de Trump llegan en el tercer día consecutivo de protestas en la ciudad de Los Ángeles, después de que el viernes el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) realizara al menos siete redadas migratorias.
En respuesta a las manifestaciones desatadas, Trump ordenó el despliegue de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional y este domingo algunos de estos militares fueron desplegados frente al edificio federal, ubicado en el centro de Los Ángeles.
La Guardia Nacional de EE.UU. llega a Los Ángeles
Tropas de la Guardia Nacional de Estados Unidos comenzaron a llegar a Los Ángeles en la madrugada y la mañana del domingo como parte de los 2.000 efectivos que el presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó desplegar en la ciudad para aplacar las protestas contras redadas masivas de migración, informó el Comando Norte de EE.UU.
«El 79 Equipo de Combate de la Brigada de Infantería ha desplegado aproximadamente 300 soldados en tres ubicaciones distintas en el área metropolitana de Los Ángeles. Están a cargo de la seguridad y protección de la propiedad y el personal federal», publicó el Comando Norte de EE.UU. en X.
Imágenes de la cadena de televisión local KABC mostraban esta mañana a miembros desplegados cerca del Ayuntamiento de Los Ángeles antes de llegar a un edificio federal, mientras sacaban equipamiento de sus vehículos.
Además, también captó a tropas reuniéndose a lo largo de la calle Alameda, en el centro de Los Ángeles, y conduciendo a través de la localidad de Paramount, de mayoría latina y donde hubo enfrentamientos más intensos horas atrás.
Trump culpa a la «izquierda radical»
Trump culpó a la «izquierda radical» de estar detrás de las protestas y disturbios de Los Ángeles, ciudad que hoy se enfrenta a su tercer día de choques entre manifestantes y autoridades.
«Estas protestas de la Izquierda Radical, por instigadores y a menudo alborotadores pagados, no será toleradas. Además, a partir de ahora, no se permitirá el uso de máscaras en las protestas. ¿Qué tiene que ocultar esta gente y por qué? Una vez más, ¡gracias a la Guardia Nacional por un trabajo bien hecho!», escribió Trump en su cuenta de Truth Social sobre unos enfrentamientos producidos en distintos puntos de Los Ángeles y que se han saldado con decenas de detenidos.
En la publicación, el mandatario aprovechó para criticar al «incompetente» gobernador demócrata Gavin Newsom, al que renombró en tono denigrante «Nuevaescoria» (‘Newscum’, jugando con la sonoridad de su apellido) y contra la alcaldesa Karen Bass: «Basta con ver cómo gestionaron los incendios», dijo Trump.
Por su parte, Bass calificó de «pose» y medida «innecesaria» la decisión de la Administración Trump de ordenar el despliegue de la Guardia Nacional.
«Esto es una pose (…) Esto es completamente perturbador para una ciudad que ya ha sufrido tanto en los primeros seis meses del año (asolada por graves incendios)», sostuvo la regidora en declaraciones al periódico Los Angeles Times.
Y añadió que ha intentado «hablar con la Administración» y comunicarles que «no había ninguna necesidad de tener tropas sobre el terreno» porque «las protestas de anoche en Los Ángeles fueron relativamente menores, de unos 100 manifestantes»: «Los Ángeles ha estado completamente en paz durante todo el día», recalcó.
Choque del Gobierno Trump y autoridades locales por las protestas en Los Ángeles
Ayer, tras conocerse la noticia de que Trump desplegaría tropas de la Guardia Nacional en Los Ángeles, el secretario de Defensa, Pete Hegseth, fue un paso más allá y amenazó con enviar infantes de la Marina estadounidense «si la violencia continúa».
Esto provocó una fuerte reacción del gobernador de California que consideró que eso era un «comportamiento desquiciado».
El sábado las manifestaciones se concentraron en la ciudad de Paramount, donde más de 50 vehículos federales realizaron un operativo migratorio en una empresa.
Activistas y miembros de la comunidad protestaron tratando de evitar las detenciones, pero por más de dos horas los agentes federales repelieron a los manifestantes con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras.
Se registraron múltiples personas heridas entre los manifestantes golpeados por balas de goma y las granadas.
Las autoridades utilizaron tácticas militares para dispersar a los manifestantes para poder sacar a los detenidos.
El Departamento de Seguridad Interna se ha quejado por la respuesta, que generó algunos actos vandálicos y grafitis contra el edificio federal y los vehículos de las agencias migratorias el viernes por la noche, tras la primera jornada de operativos migratorios en al menos siete ubicaciones de la ciudad de Los Ángeles.
Newsom pide a manifestantes: «No le den a Trump lo que quiere»
El gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, pidió a los manifestantes reunidos este domingo en el centro de Los Ángeles mantener las protestas contra las redadas masivas de migrantes pacíficas: «No le den a Trump lo que quiere», escribió en su cuenta de Instagram.
«Hablen alto. Permanezcan pacíficos. Mantengan la calma. No usen la violencia y respeten a los agentes de la ley que están haciendo todo lo posible por mantener la paz», ahondó el gobernador en su mensaje.
Newsom ha acusado a la Administración del presidente de EE.UU. Donald Trump de crear un «espectáculo» y sembrar el «caos» con las detenciones a migrantes realizadas por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en California desde el viernes.
El gobernador también informó hoy que había solicitado formalmente a la Administración de Trump la retirada del «despliegue ilegal de tropas en el condado de Los Ángeles» y que fueran devueltas a su mando.
«No teníamos un problema hasta que Trump se involucró. Esta es una grave violación de la soberanía del Estado, inflamando tensiones mientras sacan recursos de donde realmente se necesitan. Rescinde la orden. Devuelve el control a California», afirmó Newsom en Instagram tras hacer pública una carta dirigida al secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth.
Esta es la primera vez en 60 años que un presidente estadounidense despliega la Guardia Nacional de cualquier estado sin contar con la autorización del gobernador a cargo, que es el comandante en jefe de las fuerzas militares estatales.
Detenidos de diversos países
El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS) publicó hoy un listado con once detenidos, de diversas nacionalidades, después de una semana de redadas migratorias masivas en Los Ángeles.
Los individuos, que proceden de Vietnam, Filipinas, México, Ecuador, Perú y Honduras, fueron arrestados por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) como inmigrantes indocumentados, según el DHS, que los acusa supuestamente de ser «asesinos, delincuentes sexuales y otros delincuentes violentos» sin aportar sus expedientes.
Los detenidos -todos hombres- tienen edades comprendidas entre los 26 y los 55 años, y, según el DHS, se les imputan cargos que van desde el narcotráfico, el asesinato, o la violación, hasta el robo de vehículos con violencia y disparar contra viviendas en supuestos delitos cometidos por todo el condado de Los Ángeles.
Al menos 5 taxis autónomos fueron quemados en Los Ángeles
La tensión escaló en Los Ángeles en la noche de este domingo con la quema de al menos cinco taxis autónomos, muy cerca de donde se desarrolló una manifestación pacífica contra las redadas migratorias y el despliegue de tropas de la Guardia Nacional de EE.UU.
Según pudo constatar EFE, un grupo de personas que fue dispersado por la policía de la manifestación principal, se dirigieron a otra vía y la emprendieron contra los vehículos de transporte público que se trasladaban por la icónica Placita Olvera, el punto de fundación de la ciudad.
Los taxis autónomos de Waymo, una empresa de tecnología de conducción autónoma, propiedad de Alphabet, estaban vacíos y no comprometieron la salud de ninguna persona.
Varias patrullas de la Policía de Los Ángeles estacionadas en la Autopista 101 también fueron vandalizadas por un grupo de jóvenes encapuchados, que fueron dispersados con gases.
Los pequeños grupos de manifestantes, que pintaron los edificios federales de Inmigración y de Los Ángeles, también desinflaron las llantas de vehículos que se encontraban estacionados.
Los hechos se dieron poco después de que elementos de la Policía de Los Ángeles lograran despejar una importante autopista, que fue tomada por los manifestantes para expresar su mensaje de oposición contra las medidas del Gobierno federal.
Alcaldesa condena violencia en manifestaciones
Por su parte, en una conferencia de prensa, la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, se mostró visiblemente frustrada y decepcionada por lo que dijo que la ciudad “no necesita ser destrozada».
Bass también dijo que ha mantenido conversaciones con funcionarios de la Casa Blanca para lograr que se retiren los soldados de la Guardia Nacional, que fueron desplegados por el Gobierno de Donald Trump, tras las manifestaciones focalizadas que fueron controladas.
«Desplegar tropas federales es una escalada peligrosa, pero debemos ser realistas al respecto. Se trata de otra agenda. No se trata de seguridad pública. Claramente no hay un plan ni una política», declaró Bass.
La alcaldesa garantizó que defenderá a todas las personas que consideren a Los Ángeles su hogar, pero condenó la violencia derivada de las protestas.
«Si se va a permitir la violencia, si se intenta tomar el control de una autopista, se sufrirán las consecuencias», puntualizó.