Como final de cuento de hadas, es como nos hacen parecer el caso Emilio Lozoya, ese que se queda en prisión a esperar una condena, que es tratado sin privilegios y al igual que una Rosario Robles, porque con la paridad, el gobierno no se puede dar el lujo de tratar mejor a un delincuente hombre que a una mujer, porque entonces los deja muy mal parados, lo sabe Andrés Manuel, Alejandro Gertz y hoy ya tuvo que haber descifrado el mensaje el mismo Lozoya.

El lunes por la noche se supo que el ex director de Pemex, pidió 60 días más para poder reunir pruebas a su favor, sin embargo por primera vez y después de cinco “oportunidades” otorgándole más tiempo, un juez no sólo le negó más tiempo, sino que le solicitó que fuera de manera presencial a su audiencia celebrada ayer. Esto nos indicaba que el señor Lozoya ya no gozaría de tantos privilegios, luego de su desafortuanda e inconveniente cena en el restaurante Hunan.

Llama mucho mi atención que fuera precisamente la Fiscalía General de la República, a cargo de Alejandro Gertz Manero, la que ordenó en calidad de urgencia la prisión preventiva al exdirector de Pemex bajo el argumento de que podría fugarse, mismo que es acusado de recibir sobornos de Odebrecht, tras más de un año afrontando el proceso judicial en libertad, porque Gertz Manero fue pieza clave para que Lozoya no pisara la cárcel y lo es también para que hoy ya haya pasado su primera noche tras las rejas, es decir, Lozoya fue tratado como delincuente de alta peligrosidad, tan así que tuvo que entrar al Reclusorio Norte a pie, sin ningún tipo de consideración como las que tuvo con anterioridad, gracias a “su amigo” el fiscal.

Pero eso no es lo mejor del cuento de hadas, lo mejor y más curioso, es que para que la Fiscalia se ponga a trabajar o finja la acción, debe tener la presión social y mediática encima, aplicando un “disculpe usted” y continuando el show viral desde prisión, que es ya, la locación favorita para los guionistas y de la sociedad, porque somos un pueblo tan sediento de justicia que nos muestran lo que queremos ver, ya sea porque hay que salvar la reputación del Fiscal o porque se les puede armar la revolución social.

Y como buen cuento de historia feliz, no pueden faltar los aplaudidores que a río revuelto, esperan hacerse notar, como en el caso del dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, quien afirmó que la detención “rompe con el círculo vicioso de la impunidad en México en donde había protección política para los corruptos”, aunque reitero, de no ser por su cena en el Hunan, hoy Emilio Lozoya estaría gozando de su libertad y de 60 días más para alargar su audiencia, lo que nos hace ver que para que la justicia se aplique en nuestro país se deben romper las redes sociales mostrando la verdad, no el círculo vicioso que manifiesta el dirigente de Morena.

Finalmente, mientras Lozoya durmió desconcertado por el trato y su sorpresa de ayer, Rosario Robles seguramente tuvo un sueño reparador.