El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha advertido a su homólogo ruso, Vladímir Putin, que Rusia tiene un plazo de entre 10 y 12 días para demostrar avances concretos hacia el fin de la guerra en Ucrania. En caso contrario, enfrentará sanciones económicas y aranceles.

Desde Escocia, donde ha mantenido encuentros con líderes europeos, Trump ha expresado su decepción con Putin por la falta de progreso tras más de tres años de conflicto. “No vemos avances. No tiene sentido esperar. Voy a reducir el plazo que había fijado a principios de mes y establecer uno nuevo: 10 o 12 días desde hoy”, ha declarado durante una reunión con el primer ministro británico, Keir Starmer.

El mandatario estadounidense había planteado anteriormente un plazo de 50 días, pero ha decidido acortarlo al considerar que “ya sabe cuál será la respuesta” del Kremlin. Por su parte, el vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso, Dmitri Medvedev, ha denunciado que Trump está jugando a “un juego de ultimátum contra Rusia” y ha amenazado que ello es “un paso hacia la guerra”.

Trump también ha afirmado que no está interesado en mantener más conversaciones con Putin y ha asegurado que, de no ver avances, recurrirá a sanciones económicas y posiblemente a aranceles secundarios dirigidos a compradores de exportaciones rusas. “No quiero hacerle eso a Rusia. Amo al pueblo ruso”, ha matizado, aunque ha insistido en que está preparado para actuar.

El presidente estadounidense ha criticado a su vez los ataques rusos recientes contra ciudades como Kiev. “Pensamos que lo habíamos resuelto muchas veces, y luego Putin lanza cohetes contra un asilo en alguna ciudad. Eso no es el camino”, ha establecido.

Trump ha presumido de avances diplomáticos en otros conflictos internacionales y ha sugerido que debería recibir el Nobel de la Paz, aunque sus esfuerzos en Ucrania aún no han dado frutos. Antes de asumir la presidencia, prometió que pondría fin a la guerra en 24 horas.