El fin de las campañas

No hay fecha que no llegue ni plazo que no se cumpla, esta semana culminan las campañas electorales para finalmente cumplir con nuestro derecho y al mismo tiempo obligación de salir a votar el próximo domingo 2 de junio.

Los cierres de campaña empezaron este sábado con Eduardo Rivera Pérez y Alejandro Armenta Mier, candidatos a la gubernatura del estado, quienes con sus respectivas y cuestionadas cifras de asistentes (38 y 60 mil respectivamente), culminaron sus eventos proselitistas, acompañados ambos, por las candidatas a la Presidencia de México; en el caso de Alejandro Armenta por Claudia Sheinbaum, y Eduardo Rivera por Xóchitl Gálvez.

El número de asistentes, es finalmente eso, un número, la realidad la vamos a ver este domingo en las urnas, esperando que la elección más grande en la historia del país, sea referente por la gran participación ciudadana y no por conatos de violencia, que lamentablemente se vienen arrastrando de varios meses atrás, entre asesinatos y amenazas que esperemos no se repliquen para esa fecha.

Hasta el 29 de mayo todos los candidatos están posibilitados a difundir sus actividades de campaña, sus guerras sucias, ¡que vaya que hubo muchas! y en general sus últimos acontecimientos, previos a la veda obligatoria que marca la ley.

Nos aventamos un periodo largo de actos anticipados de campaña, de incertidumbre en la designación de candidatas y candidatos, de divulgaciones sin sentido y pocas propuestas de beneficio ciudadano, así como de debates mediocres a nivel nacional, ahora esperemos a que terminen de la mejor manera.

Las casas encuestadoras se llenaron los bolsillos con “sus punteros”, algunas perderán credibilidad después de la elección, otras destacarán y ya veremos si hubo algunas que tuvieran el poder de redireccionar el voto, que honestamente lo dudo.

Afortunadamente, llegamos a los últimos días del proceso electoral, el más violento en la historia de México, por cierto, la siguiente semana estaremos dando cuenta de los preliminares de la elección. Así que salgamos a votar libre, responsablemente y con decisión.